Lunes 13 de noviembre
23.00 horas.

Un pequeño grupo perteneciente al equipo organizador del XIV Congreso de Escuelas Católicas, Emociona. Comunicación y educación,  comienza a preparar la maleta para Oviedo. Las prisas para ultimar todos los detalles nos llevaron a doblar los trajes recién planchados, marcando bien las arrugas que luego luciríamos el día D.

Martes 14 de noviembre
10.00 horas.

Viaje de ida cargado de incidencias. Alguno ha estado a punto de mandar su maleta al Cono Sur en lugar de a Oviedo; arreamos hasta con el abrigo del taxista, y en el aeropuerto ha habido algún cacheo casi de sonrojarse.

13.00 horas.

Oviedo nos recibe con un sol espléndido pero nosotros nos encerramos en el hotel y en el auditorio y poco lo podemos disfrutar. Se están levantando ya las primeras estructuras que conformarán nuestra imagen pero el bello edificio que nos acoge este año está frío y desangelado. Empezamos a empaquetar 1.600 libros; se nos ha ido la cabeza.

Miércoles 15 de noviembre
9:00 horas.

Acabamos de desayunar y nos organizamos para dar las últimas instrucciones a las azafatas, revisar el catering, la escenografía y los medios técnicos, los stand, los periodistas… los nervios ya a flor de piel.

17:00 horas.

Afortunadamente llegan los refuerzos, los necesitábamos. Se incorpora todo el equipo de Madrid y el de Asturias sigue a nuestro lado desde la tarde anterior. Una rueda de prensa da el pistoletazo de salida a los actos oficiales.

Jueves 16 de noviembre
9:30 horas.

La camisa no nos llega al cuello. El período de acreditaciones se complica, las autoridades no aparecen, los ponentes vienen con cambios de última hora y los walkies arden. Por fin el orden se hace hueco y las gaitas, recién templadas, entran en escena. Comienza el Congreso.

Viernes 17 de noviembre
10:00 horas

Nos pasamos el ibuprofeno como quien comparte un caramelo. El primer día ha salido adelante pero el viernes es un día largo y ya nos pilla cansados. Las felicitaciones nos animan a seguir adelante. Cada loco sigue con su tema. Ponentes que se adelantan y ponentes que se atrasan, vídeos que fallan, sonido que reverbera y catering sin agua… No sé cómo, pero conseguimos que apenas se note nada de todo esto… bueno sí se cómo, con esfuerzo y profesionalidad.

Sábado 18 de noviembre
14.00 horas.

Finaliza el Congreso. Las últimas ponencias han sido muy emocionantes; el escenario acoge las últimas palabras y se proyectan los últimos vídeos. Mientras nos despedimos comienzan a desmontar el escenario. Comemos a las 17.00 de la tarde y casi sin terminar salimos hacia el aeropuerto; antes recogemos al Langui que ha perdido su tren. A las 23.30 llegamos a la sede de Escuelas Católicas. Nos despedimos casi sin palabras, agotados, pero contentos. Nos hemos reído mucho y hemos sudado mucho. Dos signos inequívocos de gran equipo que sabe sacar adelante un gran trabajo.

Victoria Moya
@victoriamsegura

Directora del XIV Congreso de Escuelas Católicas “Emociona. Comunicación y Educación”