No hay recetas mágicas. Cada tres años por estas fechas esperamos con impaciencia los resultados de las pruebas PISA a ver si se produce el tan ansiado milagro, pero una vez más parece que nos hemos quedado con las ganas. España vuelve a situarse en la mitad de la tabla (aunque hemos superado la media de la OCDE, esta media ha bajado) y con un panorama a largo plazo poco alentador. Y llevamos 15 años en la misma línea. Pero adentrémonos un poco en el análisis para ver que estos datos pueden tener otras posibles lecturas.

PISA nos ayuda a orientar las políticas educativas, al enlazar los resultados de los alumnos en las pruebas cognitivas con su contexto socio-económico y cultural, a profundizar en el concepto de “competencia”; a relacionar los resultados de los alumnos con sus capacidades para el auto-aprendizaje y el aprendizaje a lo largo de la vida, incluyendo su motivación e interés, su auto-percepción y sus estrategias de aprendizaje; y a elaborar tendencias longitudinales para mostrar la evolución de los sistemas educativos en un plano comparativo internacional. Sin embargo, números descontextualizados, enmarcados en escalas comparativas y en rankings de puntuación pueden crear desconfianza en los educadores. Todavía podemos y debemos aprender mucho de la educación de nuestros vecinos europeos y asiáticos, pero me atrevería a decir que, en algunos casos, tanto como ellos de nosotros.

Los datos PISA 2015 demuestran que la Comunidad Autónoma de Castilla y León se encuentra entre las 7 potencias mundiales en educación. Y Navarra y la Comunidad de Madrid también han obtenido buenos resultados que las sitúan casi a la altura de Finlandia, Canadá o incluso Singapur, país número 1 en PISA 2015. La presencia de un mayor número de centros concertados en determinadas CC.AA. tiene mucho que ver con la mejora de los resultados de estos alumnos (en Navarra, el 36% de los centros son concertados). Y en general, el rendimiento de los alumnos de los centros concertados y privados es superior al de los públicos. Para su explicación existen razones pedagógicas, socioeconómicas y culturales que permiten crear un mejor clima educativo, con entornos de mayor atención y exigencia, junto con una comunidad educativa más cualificada, logrando así mejores resultados. Pero sigue habiendo diferencias abismales entre CC.AA., donde en el extremo inferior se sitúan Andalucía, Canarias y Extremadura, separadas del extremo superior por un curso y medio de escolaridad. Y no es solo cuestión legislativa, puesto que el marco común que establece el sistema educativo español es estatal.

Necesitamos reflexionar, tomar conciencia y poner en práctica medidas para actuar sobre las causas y no sólo sobre los síntomas de estos resultados, poniendo en relieve la necesidad de ser proactivos dando respuestas preventivas. Los factores que más influyen son el proyecto educativo, metodologías utilizadas, tipo de relación profesor-alumno, contexto socioeconómico, medios personales y económicos del centro educativo, etc.

¿Cómo podemos mejorar nuestros resultados mirando cómo lo hacen las CC.AA. y los países mejor situados?

  • El enfoque competencial es fundamental, porque no es solo cuestión de lo que saben los alumnos, sino de lo que saben hacer con lo que saben. La clave está en enseñarles a trabajar en equipo, a investigar, a aprender por sí mismos, sin poner demasiado acento en la reproducción de contenidos y dando más relieve a las destrezas creativas, dirigiendo el esfuerzo de los alumnos para que sea más productivo. También es importante desarrollar procesos de evaluación inicial, continua y final al servicio del aprendizaje, para ajustar los procesos educativos en marcha hacia la consecución de los objetivos establecidos. Y no se trata de discutir si hay que poner más o menos horas de deberes cada día; PISA ha demostrado que no hay correlación entre mejores resultados y mayor número de horas de trabajo en casa. Los deberes son importantes para afianzar conocimientos, crear hábitos de estudio, responsabilidad y autonomía en el alumno, para que los padres se impliquen en el aprendizaje de sus hijos, y para poner en práctica la competencia de aprender a aprender. A medida que cambia la metodología hacia modelos más activos por parte del alumno, estos mejoran sus resultados y ya no se producen tantas repeticiones y el fracaso escolar disminuye. Así, el número de alumnos rezagados difiere mínimamente de la media de la OCDE, a favor de España, pero el número de alumnos excelentes difiere significativamente, siendo menor en nuestro país, lo que nos lleva a pensar que necesitamos potenciar la personalización del aprendizaje para promover la mejora de todos los alumnos según sus potencialidades. Hoy, el reto es seguir siendo un sistema equitativo que mejore el resultado de todos los alumnos. Al final, lo que cuenta es hacer la educación más real, más relevante para las personas, más relacionada con sus intereses.
  • La organización de los centros es otra clave. Se constata que existe una correlación directa entre la autonomía de los centros y la mejora en los resultados del sistema educativo, y en España se observa en general un menor grado de autonomía de los centros educativos en la organización y desarrollo curricular frente a otros países. Por tanto, es necesario que la Administración educativa siga afianzando una mayor autonomía organizativa y curricular, que permita la puesta en práctica de proyectos educativos de centro ajustados a las necesidades de los alumnos, con espacios, tiempos y agrupamientos más adaptados; flexibilizar la gestión de las asignaturas facilitando interdisciplinariedad y concreciones curriculares en los centros; y ratios que garanticen atender la heterogeneidad y mejorar las oportunidades educativas y sociales de los alumnos.
  • Invertir más no significa mejores resultados, sino que se ha de invertir mejor, en partidas que tengan realmente impacto en el aprendizaje de los alumnos, y además gestionarlas bien para aprovecharlas al 100%. Por ello, es necesario un compromiso inversor sostenido a lo largo de los años que permita dotar a los centros de los recursos personales y financieros suficientes para la puesta en marcha de sus proyectos educativos.
  • Invertir en formación más personalizada del profesorado siempre es una buena idea, creando carreras docentes más atractivas y vinculadas al desempeño profesional, con seguimiento sobre su desarrollo, facilitando el aprendizaje entre profesores, y compartiendo buenas prácticas. A los docentes se les debe dotar de recursos y de entornos más propicios para que sus enseñanzas den fruto. Un mayor grado de autonomía pedagógica también requiere de un acompañamiento docente más exhaustivo y procesos más generalizados de evaluación objetiva de los centros educativos, que se están llevando a cabo en menor medida en nuestro país frente a otros países con mejores resultados en PISA. 

Podemos sintetizar los tres pilares sobre los que fundamentar el éxito y la política educativa de nuestro sistema educativo para que nuestros alumnos mejoren en sus resultados educativos:

  • Aumentar la autonomía pedagógica, organizativa y de gestión de los centros al tiempo que mantenemos el apoyo que se recibe por parte del Estado.
  • Establecer metas elevadas y altas expectativas de éxito en los alumnos para frenar el fracaso escolar desde la intervención rápida y en edades tempranas.
  • Continuar con los procesos de inclusión e igualdad de oportunidades, favoreciendo modelos personalizados de aprendizaje.

Estas propuestas han sido elaboradas desde la perspectiva de partir desde las más altas expectativas para toda la comunidad educativa, y con un mensaje social positivo. Aunque los medios no hagan mucho eco de estos datos, vemos que también existen razones por las que alardear de los educadores y del sistema educativo español.

Irene Arrimadas
@iarrimadas
 

Se pueden consultar los informes completos, el análisis de resultados, y las preguntas liberadas en la web del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte en http://www.mecd.gob.es/inee/estudios/pisa-2015.html

 

Si quieres conocer más propuestas pedagógicas para la mejora de las competencias en PISA, te invitamos a leer el blog http://porlainnovacioneducativa.es  de Escuelas Católicas.